lunes, 1 de febrero de 2010

Bienes de Interés Cultural

Los que me conocen saben que vivo en un pequeño pueblecito cerca de Murcia city. Con apenas 4.000 habitantes, el pueblo ha crecido en torno a dos calles, una iglesia y un elemento hidraúlico que escasea ya: una noria de elevación de agua.

Rueda de mi pueblo años '70
Foto de los años '70 (descargada de Internet, desconozco quiénes son los fotografiados)


En 1982 esta "rueda" obtuvo la calificación de monumento histórico artístico nacional, que con el paso de los años ha pasado a denominarse "Bien de Interés Cultural", debido a su antigüedad y a su función económica y social.

La primera rueda data del S. XV, mandada a construir por cierta señora de renombre del pueblo y con la finalidad de surtir de agua a las distintas parcelas agrícolas existentes en la zona. A la par que la rueda, obviamente, existía ya una de las acequias más importantes de la huerta de Murcia, la acequia Mayor del Norte o Aljufía, que tiene una extensión de unos 27 kilómetros, aunque toma distintas denominaciones en función del terreno por donde pasa –pasando a llamarse, sucesivamente, Benetúcer, Benefiar, Benizá y Beneluz–, naciendo en uno de los azudes del río y regando diversas localidades hasta llegar a Murcia city.

Con el transcurso del tiempo, la huerta se ha ido parcelando, transformándose su superficie en pequeños minifundios de difícil aprovechamiento económico. Las parcelas sirven ahora para autoabastecerse de productos de huerta y poco más, pero la noria seguía dando su función hasta hace bien poco, cuando la Junta de Hacendados de la Huerta de Murcia decidió entubar la acequia, para su mayor optimización del agua, justo en un punto anterior a la rueda. Ello ha provocado que lo que ha servido durante años para elevar el agua quede, simplemente, como un bello monumento.

Rueda de mi pueblo actualmente (fotografía tomada prestada de Flickr, de la galería de Rubén S.)

Ello ha provocado que, actualmente, la estructura de la noria se encuentre muy deteriorada, ya que no cumple su función básica. Muchas han sido las protestas de vecinos ante el alcalde pedáneo* y de éste ante las instituciones encargadas de su mantenimiento, pero entramos en un tira y afloja institucional respecto de quién tiene que arreglar la rueda: la Junta de Hacendados dicen que ellos no, porque es un bien de interés cultural y debe hacerlo la Consejería de Cultura y éstos dicen que ellos tampoco porque es una estructura que pertenece a la Junta de Hacendados y deben arreglarlo ellos. Y unos por otros la casa se queda sin barrer.

Pero he aquí que los movimientos ciudadanos a veces dan sus frutos y en la última semana, gracias a las denuncias vecinales y de una asociación, Huermur, la noticia de que la noria se está estropeando irremediablemente ha salido en la prensa local y, quieras que no, se ha hablado algo del problema.

Lo que necesitamos ahora es que se arregle, no importa quién, importa cuándo y que sea pronto y de manera adecuada.

Tío Pencho y rueda de mi pueblo
"Chiste" en la prensa local



*NOTA: Mi pueblo no tiene ayuntamiento propio y pertenecemos al municipio de Murcia, aunque la pedanía tenga entidad propia y una historia de más de 500 años, hay un representante del pueblo con la Administración Local de Murcia, que es quien hace y deshace con el resto de Administraciones, por lo que estamos de manos atadas ante cualquier reclamación.

2 comentarios:

Le poinçonneur dijo...

La Ñora...la última vez que la vi debía tener unos siete o ocho años -yo, claro, ella bastantes más :P-.

MMdeplanetamurciano dijo...

En la ñora le daba yo una patá a algunos; la dejadez con estos temas de la administración es desesperante.