jueves, 30 de septiembre de 2010

HUELGA GENERAL: ASÍ NO

Ayer trabajé desde casa. No quise ir al despacho porque estoy en pleno centro de Murcia city y mi calle es la calle por la que pasan todas las manifestaciones de esta ciudad y, para evitar follones de altavoces, consignas y música estridente, decidí llevarme mis expedientes y quedarme en casa, como buena autónoma. Por lo tanto, desayuné, almorcé, comí y cené con noticias sobre la huelga. He visto las noticias sobre la huelga en 24 horas de RTVE, en CNN+, en Antena 3 y en Telecinco, así que puedo decir que hablo con un poco de conocimiento general.

Partimos de la base de dos grandes hitos aprobados por el Gobierno de Zapatero para justificar esta huelga: el recorte salarial de los funcionarios (aprobado el 20 de mayo de este año en Consejo de Ministros) y la reforma laboral (publicada el 17 de Junio de este año en el BOE). Sobre estas dos premisas los sindicatos generalistas (o sea, UGT y CC.OO.) empezaron a hablar de huelga general.

En contra de lo que hubiera sido lo lógico, UGT y CC.OO. decidieron convocar la huelga para el mes de Septiembre. Las razones, varias y múltiples, pero no tuvieron el arrojo y la valentía de hacerlo a la manera vasca: ya y pronto. El País Vasco vivió su jornada de huelga el 29 de Junio, lo que provocó que ayer la huelga general pasara sin pena ni gloria por esa comunidad.

¿Y qué ocurrió entre Junio y Julio de 2010 para que los sindicatos generalistas no convocaran la huelga general a nivel nacional? ¡Ay, amigos!, qué ciegos somos a veces.

En esas fechas, España entera vivíamos pegados a la tele para ver a nuestro equipo nacional ganar una copa de atrezzo de una competición de fútbol. No nos engañemos, convocar la huelga entre el 16 de Junio y el 11 de Julio o, incluso, en fechas posteriores no hubiera sido una medida muy popular. Era más importante seguir con nuestras bandericas a la Roja y extasiarnos ante los goles de Villa e Iniesta que pensar en los trabajadores.

Yo ayer no hice huelga. Ni creo que las haga en un futuro. Como profesional autónomo, soy la puta de los trabajadores. Trabajo en un despacho en el que pago un pequeño alquiler por 12 m2 más las zonas comunes. No tengo nadie a mi cargo y yo me tengo que bastar para sacar todo el trabajo adelante. El Gobierno de turno (el que sea) nos ha ninguneado durante años a los autónomos, desde hace poco podemos optar a una Incapacidad Temporal si nos ponemos enfermos (vamos, que podemos cogernos la "baja"). Nuestras cuotas a la Seg. Social son, en proporción, más elevadas que las de un trabajador por cuenta ajena y nuestras pensiones son más bajas. El día que me quede embarazada y tenga niños tendré que hacer encaje de bolillos para poder dejar mi trabajo y mis cuotas durante el período de lactancia., porque no tengo ninguna ayuda como la de una trabajadora por cuenta ajena. Todo ello a pesar de que el pequeño comercio está compuesto por un número inmenso de trabajadores autónomos, de que la mayoría de transportistas de nuestro país son autónomos y de que muchos de los mercados básicos de alimentación se mueven con autónomos.

Sin embargo, ayer muchos de esos autónomos se vieron abocados a cerrar por temor a los piquetes. Y muchos vieron cómo las cerraduras de las persianas de sus negocios aparecían llenas de silicona. Según datos de la Asociación Española de Comercio Minorista, sólo el 10% de los comerciantes hicieron huelga, por lo que un 90% abrió las puertas de sus negocios.

No me creo la política del gobierno de Zapatero porque ha demostrado actuar tarde y mal. Mal porque ha apoyado a los bancos con inyecciones de dinero increíblemente elevadas cuando ellos son uno de los factores que ha provocado esta crisis. Mal porque no ajustó las tuercas de los inmensamente ricos cuando debería haberlo hecho. Mal porque prometió ayudas a los desempleados, a los padres que acababan de tener hijos, a las madres que acababan de parir y todo eso se ha quedado en aguas de borrajas por la crisis.

Pero es que tampoco me creo a los sindicatos. Mi padre ha sido sindicalista en un sindicato menor, pero muy activo entre las entidades de crédito. No estaba liberado, pero tenía horas sindicales y un jueves al mes las juntaba todas y se iba de sindicalista activo a arengar a sus compañeros. De cara a negociar el convenio de su entidad de crédito, vio asqueado cómo UGT y CC.OO. hicieron de su capa un sayo y acabaron haciendo lo que les dio en gana con la negociación colectiva.
Mi hermana trabaja en una gran empresa de la alimentación. Y cuando digo grande, me refiero a que es líder en el sector de la alimentación de bebés y del sector de las confituras y mermeladas, vendiendo sus productos en España, Italia, Alemania, Francia y elaborando productos específicos para grandes cadenas hoteleras europeas. Lleva casi 4 años en la empresa con una mierda de contrato fijo-discontinuo. Cuando falla el trabajo (y este año ha fallado y mucho) no la llaman. En teoría, debería haber sido hecha ya empleada fija. Pero no lo es y cree que aún le faltará mucho para serlo. Cuando ha hablado con los enlaces sindicales de UGT y CC.OO. no le han sabido o querido dar respuesta de su problema. Y, lo mejor, ayer no trabajó, hubo "cierre patronal": la empresa paró máquinas y cerró la factoría en previsión de que hubiera problemas con los piquetes. Pero el sábado trabajan para recuperar las horas perdidas. ¿Dónde están los sindicatos para protestar sobre ese cambio de horario? ¿Dónde están cuándo deben apretar a la empresa pra que haga fijos a los trabajadores fijos-discontinuos?

Me dedico al Dº Laboral, a la defensa de trabajadores frente a empresarios y cuando veo los contratos que tenemos (y los que están por llegar) me pregunto que dónde estuvieron los sindicatos para que se dieran los "contratos basura", porqué no han presionado de verdad al gobierno de turno para cambiarlos.

La huelga de ayer no fue un éxito, no. Tuvo sus repuntes álgidos en sectores como la automoción, la industria, etc., pero las ciudades no se habían cerrado. Una huelga sólo es efectiva si tiene los efectos que tuvo la huelga de trabajadores del metro de Madrid, por ejemplo, jodiendo a todo em undo y paralizando una ciudad. Pero de todos los amigos con los que consulté (unos 10), todos habían ido a trabajar, los colegios estuvieron casi al 100%, las oficinas, administraciones, juzgados, etc., todo trabajó como un día normal.

Creo que lo peor de la jornada de ayer se puede ver en el siguiente vídeo. Vean a partir del minuto 1.20, donde unos piquetes "informativos" se acercan a una terraza y se aprecia como molestan a los clientes (presumiblemente extranjeros) de la misma e "informan" con los pitos y las manos de lo que es una huelga general. ASÍ NO DEFENDEMOS LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES, SINDICALISTAS, ASÍ COACCIONAMOS A LA GENTE Y LES METEMOS MIEDO.



NOTA: Nunca he censurado los comentarios, pero aquellos que no respeten la opinión que se vierte aquí y/o utilicen un lenguaje altisonante, serán eliminados.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Viajes estivales (IV)

Termino ya con la crónica.

El viernes 6 decidimos visitar Cáceres, mucho más cercana a Mérida que Badajoz (y mucho más bonita). La entrada a Cáceres ciudad la hicimos en coche por una punta... y le dimos dos vueltas a la ciudad, buscando la Plaza Mayor. Cuando íbamos a enfilar por segunda vez hacia la plaza de toros, decidimos aparcar y andar y resultó que estábamos a sólo 2 calles del centro histórico.

Mr. Osako en la esquinica de una casa. Observad la ventana de arriba, muy típica en Extremadura, que da justo a las dos fachadas de la casa.

Nos dirigimos a la Oficina de Turismo y contratamos una visita guiada de 2 horas, por 5 euros por cabeza y con acceso a varios edificios e instituciones completamente gratis. Así, pudimos ver no sólo el museo arqueológico de la ciudad, sino también uno de los aljibes de la misma, situado bajo la iglesia de los jesuitas (?), en el centro de interpretación turística y en el museo de pintura contemporáneo.

Aljibe de la ciudad, actualmente en desuso, pero con idea de aprovechar el agua de nuevo.

Además, nos explicaron la historia de varias casas singulares y aprendimos de donde viene la expresión "comer a mogollón"*.
Esquina de la casa del mono, cuya propietaria tenía uno y lo cuidaba como a su hijo. Cuando se quedó encinta y tuvo su bebé, descuidó al mono, éste cogió celos del bebé y lo estrelló contra el suelo de la calle desde la azotea de la casa.


Torre de palacete habitado actualmente. El aire mecía las hojas de la enredadera y era espectacular verlo.


Mr. Osako con San Jorge y el Dragón, como no podía ser de otra manera...

Pidiéndole a S. Francisco que nos dé suerte y que nos toque la lotería, para ver si podemos conseguir nuestro sueño.



Después de comer en la Plaza Mayor (que está en obras y no se aprecia bien su belleza), marchamos a descansar a nuestro refugio aljucense. Más piscina y una estupenda sesión de termas romanas nos hizo imaginar que estábamos en el paraíso.

Al día siguiente, sábado 7 de Agosto, nos fuimos a Mérida, a terminar de ver el Circo Romano, hacer unas compras de recuerdo y pasar por el súper para repostar vituallas en el camino. Pero antes de ir, yo me empeñé en ver el destacado "Dolmen de Lácara", que estaba a unos kilómetros de nuestro alojamiento. Así que nos fuimos camino de una finca extremeña y allí entramos. Y cuando llevábamos unos 2 km finca adentro y unos cuantos roces del bajo del coche en el camino, vimos unas edificaciones y preguntamos: era la finca de al lado y había que volver a salir a la carretera y entrar andando. No te digo cómo se me puso el coche blanco de bonico del polvo del camino.

El caso es que desandamos el camino hecho (en coche, claro) y nos metimos en la susodicha finca. Tras andar como un kilómetro aproximadamente, encontramos ésto:

Meg a la entrada del corredor del sepulcro. Más información, aquí. No te digo lo que impresona ver esas enormes piedras y pensar que quien lo hizo no conocía la escritura y, probablemente, tampoco se había inventado la rueda.

Y tras una tarde relajada y una cenita tranquila, hicimos las maletas y nos acostamos, al día siguiente, un viaje de 8 horas nos llevaría directamente al Puerto de Mazarrón a pasar otra semana de descanso.

Fin

*"Comer a mogollón"
es una expresión que proviene de las enormes fiestas que daba la familia Mogollón (apellido auténtico) en Cáceres y que estaban siempre bien surtidas de comida y bebida. La gente aprovechaba y comía "a mogollón", ahorrándose varios días de pitanza en casa. Tanto derroche gastronómico derivó hasta esta expresión que indica más o menos "comer como si no hubiera mañana...".

lunes, 20 de septiembre de 2010

Colaborando

He escrito un post para otro blog. Lo podéis leer en Le Poinçonneur des Lilas.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Viajes estivales (III)

A ver si con éste (y otro post más) termino ya la entrega de mis memorias estivales, que me he dormido en los laureles.

Después de ver Mérida y Navalvillar de Pela, Casas de D. Pedro, el embalse del Orellana y los inmensos campos de arroz y maiz de las Vegas Altas del Guadiana, el jueves 5 de Agosto nos fuimos a Trujillo, ciudad del conquistador Francisco Pizarro, conquistador de Perú y de Francisco de Orellana, explorador del Amazonas.

Trujillo es una ciudad con un castillico en to' lo alto del pueblo, con una plaza bien hermosa, con varias iglesias y con casas antiguas, todo ello de bonita piedra.

Mr. Osako en la Plaza Mayor, junto al monumento a Pizarro.

Meg, en to' lo alto del castillo.

Una de las cosas que más nos sorprendió es que para entrar en cualquier sitio, había que pagar 1'40 euros. En la iglesia, en el castillo, en la casa de Pizarro... Los pagamos en estos tres sitios, pero nos negamos a pagar más en lugares tan absurdos como el Museo del Traje o en los dos o tres conventos que se podían visitar. Además de pagar y ver las vistas, no había mucho más dónde rascar. Admiramos la iglesia de la Plaza Mayor (sin explicación alguna) y observamos el bonito mural realizado por los chicos del instituto explicando las diferentes partes del castillo. Y, como las comparaciones son odiosas, lo comparamos con Mérida, donde todo, absolutamente todo, tiene carteles explicativos cada 20 metros: el teatro, el anfiteatro, el circo romano, la alcazaba, la Casa de Mitreo... y claro, Trujillo se nos antojó cara y escasa.

Vista de la Plaza Mayor desde el Castillo

Comimos en un bar de la Plaza Mayor, hicimos compras en un Eroski y en una tienda de productos extremeños y, con las mismas, nos volvimos a la frescura de nuestro alojamiento y nuestra piscinica.