En resulta de que nos decidimos hace unos meses por irnos CdA y yo juntos de vacaciones, a ver si nos llevábamos bien en la convivencia diaria y otras cosas por el estilo. Tras seguir las siempre correctas indicaciones de Fanmakimaki el viajero, nos decantamos por irnos a la Comarca de la Matarraña, a la sierra, a un pueblecito llamado Beceite.
El día 23 de Agosto partíamos desde Murcia (¡qué hermosa eres!) tempranico, con la fresca de la mañana, con el objetivo de evitarnos mucho tráfico a primera hora y poder llegar al pueblo a comer. Y así fue. Tras dos paradas para hacer pis, estirar las piernas, comer algo y cambiar de conductor, llegamos a la carretera que nos llevaba al pueblo. Y nos íbamos encontrando con estos paisajes:
O con estos pequeños túneles excavados en la montaña para acceder al pueblo:
Entramos en Beceite sobre las 13.30. Hablamos por teléfono con la dueña del apartamento que habíamos alquilado y nos indicó dónde estaba la casa y como entrar: simplemente, abriendo la puerta, la llave estaba puesta por detrás. Es que asíN son los pueblos pequeños.
Y al entrar a la casa, nos encontramos con ésto:
Comimos, dormimos una señora siesta de las de pijama y orinal y nos dimos una vuelta por el pueblo. Y por las cuestas. Y por las casas de piedra. Y por la plaza del pueblo. Y por el bar, donde nos informaron de dónde comprar. Volvimos a casa, bajando las cuestas, esta vez y cenamos y nos acostamos, sabiendo que, al día siguiente, era fiesta y poco podríamos comprar o hacer.
Otro día, os cuento más.
(Si pinchas sobre las fotos, podrás verlas más grandes)
El día 23 de Agosto partíamos desde Murcia (¡qué hermosa eres!) tempranico, con la fresca de la mañana, con el objetivo de evitarnos mucho tráfico a primera hora y poder llegar al pueblo a comer. Y así fue. Tras dos paradas para hacer pis, estirar las piernas, comer algo y cambiar de conductor, llegamos a la carretera que nos llevaba al pueblo. Y nos íbamos encontrando con estos paisajes:
O con estos pequeños túneles excavados en la montaña para acceder al pueblo:
Entramos en Beceite sobre las 13.30. Hablamos por teléfono con la dueña del apartamento que habíamos alquilado y nos indicó dónde estaba la casa y como entrar: simplemente, abriendo la puerta, la llave estaba puesta por detrás. Es que asíN son los pueblos pequeños.
Y al entrar a la casa, nos encontramos con ésto:
Comimos, dormimos una señora siesta de las de pijama y orinal y nos dimos una vuelta por el pueblo. Y por las cuestas. Y por las casas de piedra. Y por la plaza del pueblo. Y por el bar, donde nos informaron de dónde comprar. Volvimos a casa, bajando las cuestas, esta vez y cenamos y nos acostamos, sabiendo que, al día siguiente, era fiesta y poco podríamos comprar o hacer.
Otro día, os cuento más.
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3 comentarios:
Te veo muy "Pitita nos enseña su residencia veraniega en la Toscana"...
El vídeo de la habitación de nuestro viaje se podría hacer en 10 segundos de lo pequeña que era.
Me ha encantado lo de PERCHERO JOHN WAYNE, porque pensaba que era un modelo que en verdad se llamaba asi, que ése era su nombre comercial, vaya crack.
Maricarmen, una teja con flores!
Ese apartamento no lo conocía, es para estar apretujado y quererse mucho. Estuve en uno más grande con chimenea falas, je je.
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